El concepto de vector de mejora
Las personas suelen
hablar de manera genérica en lo que se refiere a mejora de procesos,
sin especificar la dirección de esta mejora. Por eso es que yo
sugiero utilizar el concepto de vector de mejora, para direccionar
los esfuerzos apropiadamente.
Un vector, en física, es
una entidad que tiene una magnitud, una dirección y un sentido. El
ejemplo más claro es el de una fuerza que se aplica sobre un objeto.
Una vez definida la magnitud, es decir cuánta fuerza hago, es
importante aclarar en que dirección se ejerce la fuerza. Porque
depende de la dirección que tenga, hacia donde se moverá el objeto.
Y por último está el sentido que complementa de alguna forma el
concepto de dirección.
Asociando esto a las
mejoras operativas y de procesos, quiere decir que no basta con
buscar mejoras, sino que las mismas deben realizarse en una
determinada dirección. Por un lado, porque nuestros esfuerzos son
limitados y por lo tanto deben aplicarse en aquellos puntos donde
rindan mayores frutos. Por el otro, porque la organización tiene
determinados objetivos y las mejoras deben estar orientadas a cumplir
con esos objetivos.
Estos vectores de mejora
vienen dados por la estrategia de la organización y más
particularmente por su estrategia de operaciones. Es desde allí que
nace la dirección de estos vectores. Para una organización cuya
propuesta de valor es la buena atención del cliente, el vector de
mejora es “la atención del cliente” y no el “costo” o la
“velocidad”. Esta aclaración parece una trivialidad, pero si no
se determina de antemano cuáles serán los vectores de mejora, se
puede caer en la incorporación de mejoras que atentan contra la
estrategia de operaciones y la propuesta de valor que se diseñó.
Sin vectores de mejora
previamente definidos las mejoras quedan libradas al criterio de
quien las busca y puede ser que se terminen orientando los esfuerzos en
la dirección equivocada. En el mejor de los casos se habrá perdido
tiempo y dinero, pero en el peor de ellos se puede terminar arruinando un gran
negocio.
Es el gradiente de las mejoras.
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