El proceso de las ideas
Hay procesos para innovar, pero en
la gran mayoría de los casos estos procesos se centran
fundamentalmente en tamizar las ideas existentes, para encontrar así
aquellas que con éxito serán implementadas. Sin embargo, poco se
hace para generar esas ideas que ingresan como input del proceso de
selección.
La gran mayoría de los procesos
de innovación se centran en la forma en que las ideas se seleccionan
y esto es natural, porque pareciera ser la única parte de todo el
proceso que da resultados predecibles. Pero la verdad es que no
importa que tan bien se haya armado ese proceso, hay que alimentarlo
con ideas para que funcione. ¿Cómo hacer entonces para generar estas ideas?
En operaciones, sobre todo en la
producción, se han desarrollado varias técnicas, como el sistema de
sugerencias Kaizen. Sin embargo, no todas las organizaciones han
logrado sistematizar este tipo de mecanismos y por lo tanto las ideas
son más una casualidad que una realidad buscada. Esto significa que no se está explotando al máximo la capacidad del capital
humano para generar ideas que ayuden a mejorar la organización.
Pero si bien en general se observa
un bajo nivel de sistematización en las áreas de producción y
operaciones en general, cuando vamos a otras áreas, sobre todo en
funciones de soporte o bien en operaciones de servicios, nos
encontramos con que a veces ni siquiera se convoca a las personas
para que hagan sus aportes.
Existen varias técnicas para que
las personas se pongan a pensar en cosas nuevas: esto no es una
afirmación teórica, yo las uso y dan resultado. Sólo es necesario
hacer que las personas le dediquen un poco de tiempo a esta cuestión
todos los años. Un buen facilitador y un sistema bien diseñado son
los aliados estratégicos necesarios para que las ideas que surgen se
puedan ordenar y definir apropiadamente, para que puedan convertirse
así en input apropiado para el proceso de selección.
A veces no basta con una sola
técnica o con un solo espacio para poder recolectar estas ideas, es
necesario abrir varios frentes en distintos momentos y con distintas
metodologías. Lo importante es que la organización esté dispuesta
a poner sus energías en generar estas ideas. Lo que digo aquí vale
también para las áreas comerciales.
Si no hay buena materia prima para
los procesos de selección de las ideas, es inviable que la
innovación adecuada llegue.
Para seguir profundizando: Innovar es un proceso
Para seguir profundizando: Innovar es un proceso
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